Cuando éramos pequeños dependíamos totalmente de los seres más importantes de nuestra vida: nuestros padres. Nuestra vida estaba prácticamente, en sus manos, ya que ellos eran los encargados de nuestra sobrevivencia. Son quienes nos tenían que prodigar amor, seguridad, protección, reconocimiento, sustento, etc. Si sus cuidados fueron apropiados y amorosos, seguro que nos formaron con una robusta autoestima y por ende somos felices; capaz de amar y de enfrentar las [ Read More ]