Sabías que el hablar de nuestros pensamientos, sentimientos y emociones nos evita muchos problemas de salud tanto físicos como psicológicos. Cuando hablamos y el otro nos escucha con verdadera empatía y comprensión; como si el otro se fundiera con uno mismo, nos da la sensación de no estar solos en este universo. Además, cuando nos sentimos escuchados y comprendidos emerge la calma que nos permite organizar y ordenar mejor nuestros pensamientos, emociones y sentimientos; y sin darnos cuenta encontramos la solución.
Si el hablar ayuda mucho emocionalmente, imagínate que nos pasaría si además de hablar sobre nuestros conflictos existenciales los escribimos. Escribir a mano es importante porque nos conecta con lo más profundo de nuestro ser, nos permite darnos cuenta de situaciones, emociones, circunstancias que no podemos verlas y que nos imposibilitan vivir la vida de manera plena y feliz.
Escribir es una herramienta terapéutica, que se utiliza en los casos clínicos. Escribir a mano, preferentemente, nos ayuda a procesar los traumas dolorosos casi indelebles, así como a superar las pérdidas, las frustraciones, los resentimientos y a entender mejor los reveses que la vida nos da. Escribir nos ayuda a sanar y a transformarnos a través de la libración de las emociones y del autoconocimiento. Si logramos darnos cuenta de lo que pasa en nuestro interior y de las causas de las experiencias negativas que vivimos; seguro tomaremos decisiones más adecuadas que nos lleven a una vida más saludable.
Escribir y hablar de uno mismo nos permite autoconocernos, tomar conciencia de quienes somos, de lo que queremos, porque estamos como estamos y hacia dónde vamos. El hablar y el escribir sobre nuestra vida nos sana y facilita nuestro crecimiento y evolución.
“Si algo no te gusta de tu vida, cámbialo, date cuenta de tus circunstancias; y decide vivir una vida más plena y satisfactoria”
Escribir y hablar de nuestros resentimientos, de nuestro sufrimiento, nuestro desamor, soledad, abandono, etc., significa sanar nuestra vida, desarrollamos y evolucionar a estados superiores de conciencia y vivir de manera más saludable y feliz.
¿Qué sucede cuando escribimos? Con el hecho de escribir liberamos tensiones internas y los bloqueos emocionales se derrumban; hacemos contacto con la parte inconsciente de nuestra mente, que permite que emerjan los miedos, las limitaciones y la causa de nuestro sufrimiento; así como las soluciones.
La verdad, no necesitas tener una especialización para escribir sobre ti mismo, sobre lo que te sucede; simplemente toma tiempo para ti y hazlo. Empieza a escribir desde lo más recóndito de tu ser; conéctate contigo mismo. ¡Toma papel y lápiz; elije el momento adecuado!”
¿Qué pasa en nuestro interior cuando nos expresamos por medio de la escritura? Bien, cuando escribimos lo hacemos de manera más lenta. Escribir es incluso más lento de lo que pensamos y hablamos. Si nos equivocamos tenemos la oportunidad de borrar y reescribirlo otra vez. Si algo no nos gusta lo modificamos; quitando o agregando; nos permite viajar al pasado y al futuro.
Recuerda que escribir nos ayuda a calmar nuestra ansiedad; disminuyendo la tensión arterial. El simple hecho de escribir sobre nosotros mismos fortalece nuestro sistema inmunológico. Además, de que nos permite reflexionar y recapacitar.
En 1999 se llevó a cabo un estudio sobre los efectos que conlleva el acto de escribir en personas enfermas. La investigación fue llevada a cabo por la Revista de la Asociación Médica Americana, de USA.
Los pacientes escribieron sobre sus experiencias traumáticas; resultando que los asmáticos mejoraron su función pulmonar en un 19% y los pacientes con artritis reumatoide mejoraron sus síntomas en una proporción del 28%.
Quieres empezar por sanar tu vida, utiliza esta estupenda herramienta. Empieza por escribir el argumento de la película de tu propia vida. Se sugiere que escribas en primera persona, describiendo tus eventos traumáticos o bien lo que te preocupa y te hace infeliz; vas a sentir un desahogo y te darás cuenta como tus pensamientos se empiezan a poner en orden; así como tus sentimientos.
Además de escribirlo, exprésalo con palabras; sabías que las palabras no expresadas nos producen síntomas que se reflejan en nuestra conducta inadecuada o mediante enfermedades: al poder expresar estas palabras los síntomas desaparecen.
Sugerencia terapéutica: Escribe un cuento que hable de tu vida con tus problemas propios, relatando tus eventos traumáticos que te han dejado una huella casi imborrable. A este cuento dale un final feliz. Sabías, que nos comunicamos con nuestra mente inconsciente mediante metáforas; y con una metáfora le decimos a nuestra mente como queremos que se resuelva nuestro conflicto.
¿Qué puedes escribir? Escribe todo lo que te preocupa, lo que perturba en tu vida, tus conflictos emocionales, existenciales e interpersonales. Es probable que al escribir recuerdes lo que has olvido para no sufrir.
Recuerda siempre que escribir de manera terapéutica es un gran beneficio para salud física y mental, para tu vida:
Escribir regula nuestros procesos mentales, incrementa nuestra creatividad porque amplia la capacidad de la actividad neuronal.
¡Escribir y hablar sobre uno mismo es una excelente medicina del alma por su enorme poder terapéutico!
¡En ti está hacer el cambio para una mejor vida!
Si tienes alguna pregunta al respecto o deseas reservar una cita para terapia persona a persona o a distancia (Skype), contratar una plática o conferencia, escríbeme un E-Mail o marca el número abajo indicado, y yo con gusto te atiendo.
Mtra. Teresa de Jesús Avilés R.
Psicoterapia Humanista
Conferencista y Facilitador
E-Mail: teresa.aviles@yahoo.com.mx Cel.2227573183 (Whatsapp)
Sitio Web: www.terapiamenteycorazon.com
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